Ingredientes
- 400 g de espinacas frescas (puedes usar espinacas congeladas si lo prefieres)
- 1 cebolla mediana, picada
- 2 dientes de ajo, picados
- 4 tazas de caldo de verduras (o agua)
- 1/2 taza de crema espesa o leche (opcional)
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- Sal y pimienta al gusto
- 1/4 de cucharadita de nuez moscada (opcional)
- Queso parmesano rallado (para decorar, opcional)
Instrucciones
- Sofríe los vegetales: En una olla Westinghouse, calienta el aceite de oliva a fuego medio. Agrega la cebolla y el ajo, y sofríe hasta que la cebolla esté transparente y fragante.
- Agrega las espinacas: Incorpora las espinacas a la olla y cocina hasta que se marchiten. Si usas espinacas congeladas, asegúrate de descongelarlas y escurrir el exceso de agua.
- Añade el caldo: Vierte el caldo de verduras (o agua) en la olla, asegurándote de que las espinacas estén cubiertas. Lleva a ebullición, luego reduce el fuego y cocina a fuego lento durante 10-15 minutos.
- Licúa la mezcla: Retira la olla del fuego y, utilizando una licuadora Westinghouse, mezcla la sopa hasta que esté suave y cremosa. Si deseas una textura más rica, puedes añadir crema espesa o leche en este momento y mezclar nuevamente. Ajusta la sazón con sal, pimienta y nuez moscada al gusto.
- Sirve: Sirve la crema de espinaca caliente en tazones, decorando con un poco de queso parmesano rallado si lo deseas.
Sugerencia de Presentación
Puedes acompañar la crema de espinaca con pan tostado o croutones para un contraste crujiente.
¡Disfruta de esta deliciosa y nutritiva crema de espinaca!
